jueves, 19 de abril de 2012

EL ARTE DE SER HUMANO.

Hablar del ser, es hablar de algo que por definición, ya está preestablecido, es decir, que es algo absoluto, constante, permanente. Si pensamos en este concepto, llegaremos a la conclusión de que el hombre no es, y no es por el simple hecho de que nace sin poseer esa capacidad de valerse pr si mismo tal como lo hace el resto de los animales.
Para poder llegar a ser, primeramente debemos aventurarnos aceptar que realmente nunca llegamos a poseer una substancia constante, algo permanente, en otras palabras, debemos de aceptar que vivimos en constante cambio y, esto es así. porque al vivir en sociedad, nos encontramos bajo un constante proceso de aprendizaje, bajo un fenómeno al cual llamamos educación.
Tal y como lo han manejado los autores de la escuela nueva, el individuo es un sujeto cambiante, que es capaz de reestructurar sus formas de pensamiento a medida que se desarrolla. El trabajo pedagógico en sí, consistiría entonces en llevar a cabo un proceso de comprensión a través del cual, podamos ir "descubriendo al ser".
Ete trabajo de "descubrir al ser", requiere que la labor educativa se lleve a cabo con respeto y con amor para ese "ser espiritual" del cual ya hemos hablado con autores como Decroly, Montessori o Claparéde. Así mismo, no podemos olvidar a autores como Rosseau o Dewey para quienes el ser, debe de ir avanzando poco a poco en el aprendizajey, siempre conforme a la naturaleza, pues ésta será la que nos irá indicando el momento adecuado en el que ese ser estye preparado para dar el siguiente paso en la educación.
En conclusión, llegar a ser, requiere de un gran trabajo de reflexión y de conscientización, que sólo se logra a travé de un continuo proceso de educación y, quien encuentra este camino, puede considerarse el más afortunado de los hombres, he ahí el gran secreto de ser humano.

1 comentario:

  1. Así es Mónica en cada individuo existe la potencia de desarrollar su ser y diferenciarse de las otras especies a través de un proceso de formación que le permita descubrirse y actuar, tarea que los pedagogos no deberíamos pasar por alto

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